Después de tanto tiempo, me he dado cuenta de que he cambiado irremediablemente desde que te conocí. Recuerdo lo ardiente, impetuoso y entusiasta de esos días en que jugábamos a conocernos, del miedo que sentía por mis inseguridades o de lo inquietante que me resultaba disfrutar de la compañía de alguien como tú.
Después de todo este tiempo,siento que lo que tenemos se mantendrá vivo y con firmeza, y me reconforta saber, que en ese futuro incierto. Tú estarás ahí conmigo. Y creo,que es por ello que durante todo este tiempo no he necesitado aprender a quererte, respetarte, cuidarte, a disfrutar contigo y estar ahí cuando lo has necesitado, porque tú has hecho que sea algo natural y exquisito.
Y es que,después de todo, sé que verdaderamente te he querido, que te amo y que te seguiré estimando con la misma o mayor vehemencia que hasta hoy. Porque eres tú el príncipe azul que un día soñé.
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